La exposición Regalos reales se presenta como una Wunderkammer, (gabinete de curiosidades), como aquellas habitaciones fornidas de "maravillas", que empiezan a proliferar, en el siglo XVI, entre la alta burguesía y la realeza en un afán de coleccionar objetos exóticos encontrados por todo el mundo. Desde el 2018, Matteo Guidi (Cesena, Italia, 1978) busca todo tipo de artículos guiado por una lista encontrada casualmente a un diario.
Guidi nos introduce de manera ficcional en un patrimonio donde los objetos no configuran un relato unitario, pero cada uno tiene la capacidad de hablar de un lugar, de un tiempo o de una relación personal. En las paredes de la sala queda registrado el inventario; un universo textual que se activa con las imágenes de las pantallas que responden en las fotografías de los objetos descritos.